
Las autoridades de Ámsterdam continúan desalojando a los turistas ociosos del Barrio Rojo. Según los nuevos planes del ayuntamiento, el flujo turístico en la zona se regulará cerrando varias calles para su limpieza.
Las multitudes de turistas dejan mucha basura, y con este pretexto, las autoridades planean cerrar calles para que los servicios públicos puedan limpiarlas. Esperan que esto calme a los residentes que se quejan del ruido y la suciedad que generan los turistas, según informa la Asociación de Operadores Turísticos de Rusia.
Además, las autoridades controlarán de cerca el número de visitantes en las calles de la zona; en caso de que se supere este límite, las calles también se cerrarán y los turistas serán redirigidos a zonas menos concurridas.
También se reforzarán las medidas para combatir el comportamiento antisocial de los turistas: se desplegarán más patrullas con dispositivos de pago móvil en el Barrio Rojo, lo que les permitirá multar in situ a los turistas que tiren basura u orinen en la calle.
El Barrio Rojo es una atracción turística muy popular en Ámsterdam. Esto genera descontento tanto entre los residentes como entre las mujeres que trabajan en la industria del sexo en la zona. Cabe recordar que este invierno, Ámsterdam adoptó nuevas normas para visitar el Barrio Rojo, que obligan a los turistas no solo a tomar fotografías, sino también a mirar a las mujeres en los escaparates; ahora deben darles la espalda.
Fuente: viajar.ru