
Un violinista estadounidense se vio obligado a dar un miniconcierto a bordo de un avión para conseguir espacio para su instrumento en el compartimento superior. La actuación improvisada tuvo lugar en un vuelo de Delta con destino a Cincinnati.
El violinista Giora Schmidt llegó a su vuelo en el último minuto y embarcó cuando los compartimentos superiores del pequeño avión regional CRJ ya estaban ocupados por el equipaje de otros pasajeros. Se acercó a una azafata y declaró que, bajo ninguna circunstancia, facturaría su violín, probablemente recordando los numerosos casos de instrumentos musicales dañados por los operarios de equipaje. Uno de esos incidentes incluso inspiró el éxito de "United Breaks Guitars".
Una azafata de Delta encontró una solución al problema ofreciendo usar el violín de un violinista a cambio de espacio en los compartimentos superiores. Luego, se acercó a otros pasajeros, ofreciéndoles guardar sus pertenencias debajo de sus asientos a cambio de un concierto, según informa ClassicFM.
Se encontró un asiento de inmediato. Sin embargo, cuando el avión comenzó el descenso, la azafata le recordó a Schmidt su promesa de dar un concierto. Las turbulencias dificultaron la interpretación, pero el músico, aun así, interpretó la Partita n.° 3 de Bach, recibiendo una gran ovación del público. Un fragmento de la actuación puede verse en la página de Facebook de Schmidt.
Fuente: viajar.ru