En estado salvaje, los pandas gigantes (del latín: Ailuropoda melanoleuca) viven únicamente en China, y en unas pocas regiones montañosas del país. Esta especie animal se consideró en peligro de extinción durante mucho tiempo: la caza furtiva y la deforestación descontrolada llevaron a que en 1976 solo quedaran mil osos bambú en libertad.
Al comprender el problema, las autoridades chinas adoptaron diversas medidas de conservación: en particular, se crearon más de 60 parques con un mayor nivel de protección. Como resultado, para 2016, el número de pandas en los bosques aumentó a 1864 individuos, y dos tercios de ellos viven en zonas seguras. En total, considerando los habitantes de los zoológicos, hay unos 2060 pandas gigantes en el mundo.
Aunque su número sigue siendo reducido, ya no están en peligro de extinción: su estatus de especie ahora es vulnerable. La existencia de centros de protección y cría ha sido fundamental para la preservación de estos raros osos. El equipo de AirPano visitó uno de los lugares más famosos: la ciudad de Chengdu. Según registros antiguos, los pandas habitaban los bosques cercanos hace 4000 años.
Chengdu, ubicada en la provincia de Sichuan, al sur de China, posee una historia milenaria y monumentos interesantes, pero sobre todo atrae a los visitantes con la oportunidad de ver osos blancos y negros. Numerosas imágenes de estos famosos animales ya en el aeropuerto les recuerdan esto a los visitantes.
La Base de Investigación de Cría de Pandas Gigantes de Chengdu opera en las afueras de Chengdu desde 1987. Sus primeros habitantes fueron seis pandas gigantes rescatados de condiciones peligrosas en la naturaleza. A lo largo de sus 30 años de funcionamiento, han nacido 176 pandas gigantes y actualmente viven allí cerca de cien ejemplares adultos.
El centro está abierto a los visitantes, lo que permite recaudar fondos adicionales para su labor. Además de comprar la entrada, se puede hacer una donación al fondo para la protección del panda. Como recuerdo, los turistas recibirán una camiseta, un peluche y un certificado de patrocinador.
El territorio del parque se divide en varias zonas: museos, puntos de información, un centro de rehabilitación para animales heridos y recintos para pandas de diferentes edades. Y no se trata solo de osos bambú: la Base Panda incluso cuenta con pandas rojos o pequeños (del latín: Ailurus fulgens). No todos saben que son los verdaderos representantes de la familia de los pandas, y que los pandas grandes pertenecen a la familia de los osos. Sin embargo, ambas especies animales tienen un ancestro común y, en estado salvaje, viven en las mismas zonas de los bosques de las tierras altas de China.
El Centro de Investigación de Chengdu es muy grande, y es difícil visitar todos los recintos en un solo día. Para recorrerlo todo, se recomienda explorar el parque en coche eléctrico. Si viene durante la temporada de mayo a septiembre, es mejor llegar justo al abrir el parque o un poco antes: en las frescas horas de la mañana, los animales están bastante activos, pero en cuanto sube el termómetro, incluso los pandas más pequeños y juguetones se duermen y se refugian en recintos cubiertos. En los días especialmente calurosos de verano, los animales suelen ser trasladados a habitaciones con aire acondicionado. Y aunque la Base de Pandas no tiene horario oficial de cierre, a las 18:00 no suele haber turistas en el recinto.
El proceso de alimentación de los pandas es muy interesante. Cada adulto necesita entre 30 y 40 kg de bambú al día, pero como esta planta no crece en tales cantidades en parques artificiales, los animales reciben un "pastel de panda" especial a base de fibras de bambú. Su sabor recuerda al tradicional pastel de manzana con nueces; ¡incluso a los empleados del parque les encanta!
Sería un error pensar que los pandas solo comen bambú: sus ancestros eran carnívoros, por lo que los osos de bambú modernos son técnicamente depredadores. En la naturaleza, a veces comen huevos, pájaros pequeños, animales, insectos y carroña: el alimento animal es una fuente esencial de proteínas para los pandas.
Sin embargo, la base de su dieta sigue siendo el bambú: a lo largo de la evolución, el cuerpo del panda se ha adaptado a esta planta, ampliamente distribuida en sus hábitats. El pulgar de las patas delanteras es un hueso modificado de la muñeca que les permite manipular incluso los brotes de bambú más finos, y el esófago y el estómago están recubiertos por una gruesa capa de tejido mucoso elástico que los protege de las astillas de bambú.
Además, a los pandas les gustan los dulces, pues obtienen este sabor de las frutas y verduras. Los osos bambú prefieren las manzanas, y a sus hermanos menores les gusta más la calabaza.
Los pandas de Chengdu se convirtieron en los héroes de los panoramas de AirPano gracias a nuestro equipo, junto con nuestros colegas de UtoVR, que trabajaron aquí como consultores en la toma de fotografías y vídeos de 360° para PandapiaY también trabajé en la postproducción. El rodaje resultó increíblemente emocionante: los pandas se encuentran entre los animales más atraídos por el público a nivel mundial; sin embargo, a diferencia de los cachorros y gatitos, son muy pocos, por lo que hay menos fotos de ellos. La panorámica desde la incubadora con un pequeño panda es verdaderamente única. Desde su nacimiento hasta la edad adulta, ¡el animal crece mil veces!
Al filmar animales, siempre existe el factor sorpresa: en algún momento, cuando el equipo ya está apagado y estás a punto de salir del set, el osezno empieza a dar volteretas sin control. A los pandas bebés se les baña a diario: se les sumerge en una bañera y se les rocía con agua para refrescarlos, lo cual también es una imagen inolvidable.
Cada panda de la reserva tiene su propio nombre. Recuerdo a Estrella, Vía Láctea, Amante de las Sombras. A cada panda o grupo de pandas se le asigna su propio cuidador: si un panda se muda a otra reserva o zoológico, el cuidador acompaña a los animales a su destino y los recibe a su regreso. Y, por último, la Base Panda cuenta con embajadores oficiales. Entre ellos se encuentran el famoso actor Jackie Chan, la popular cantante rusa Valeria y otras personalidades famosas de China y de todo el planeta.
Pero a pesar de la comodidad que ofrece este centro a los pandas, las condiciones aún distan mucho de ser naturales. Los osos bambú llevan una vida más aislada en la reserva montañosa Base Panda de Dujiangyan y Centro para el Control de Enfermedades, ubicada a 55 kilómetros de Chengdu. Los pandas llegan aquí por diversas razones: algunos nacen allí y otros son traídos para recibir tratamiento. Se han creado recintos para su fácil adaptación a la vida salvaje y para una existencia pacífica en la vejez. Parte de la reserva es completamente salvaje, y se diferencia del hábitat natural solo en el alto nivel de protección de las especies raras. ¡Este territorio es tan vasto que se puede recorrer durante una semana entera sin encontrar un solo panda!
En total, la Base Panda de Dujiangyan y el Centro para el Control de Enfermedades ocupan más de 50 hectáreas, y todos los animales sanos gozan de total independencia. Ni siquiera cuentan con comederos especiales, pero especialistas los vigilan a distancia, y si ven que un panda confundido no encuentra comida durante mucho tiempo, le colocan bambú debajo.
Puedes ver cómo se ve un "oasis de pandas" seguro desde arriba usando los panoramas de AirPano.
Recorrido virtual
Galería de fotos
Fuente: viajar.ru