
Los campamentos para niños extranjeros perdieron popularidad en 2018. Según la Unión Rusa de la Industria Turística, el número de reservas cayó en otros 11% en comparación con el año anterior, informa Interfax.
Las regiones más populares para la recreación infantil Este año, la región de Moscú, el krai de Krasnodar, la región de Leningrado y Crimea se convirtieron en los principales destinos. El número de personas que buscan pasar sus vacaciones en campamentos infantiles rusos aumentó un 81 % en 2018. Los expertos atribuyen esto a la importante depreciación del rublo.
Entre las ofertas extranjeras, los campamentos en Bulgaria (30% de todos los viajes al extranjero vendidos en 2018), Turquía (16%) y Finlandia (10%) fueron los más demandados.
Las vacaciones infantiles en Rusia cuestan una media de 35.600 rublos, mientras que en el extranjero cuestan casi el doble: 68.400 rublos. Los viajes más económicos fueron a la región de Leningrado (31.500 rublos), mientras que los más caros fueron a Crimea (43.200 rublos). Curiosamente, la demanda de campamentos en Crimea también se redujo en 111 TP3T. Los expertos de RST lo atribuyen a la mala calidad de los servicios y la infraestructura de la península.
Las mejores ofertas en el extranjero este año fueron los campamentos turcos (con un promedio de 44.500 rublos). Las vacaciones infantiles en la República Checa y Grecia fueron las más caras (alrededor de 85.000 rublos).
Cabe destacar también que en 2017 el volumen de ventas de vacaciones infantiles en el extranjero fue 81% mayor que en 2016.
Fuente: noticias.turizm.ru